"COP29: Liderazgo Petrolero, Financiamiento y NDC como retos clave."

Azerbaiyán, donde se perforaron los primeros pozos de petróleo en la década de 1840, tiene una economía profundamente dependiente de estos recursos: el petróleo y el gas representan el 90% de sus exportaciones y el 60% del presupuesto gubernamental. Incluso en vísperas de la COP, el país reafirmó su intención de aumentar la producción de petróleo y gas. En abril, el presidente azerbaiyano declaró que defenderán su derecho a continuar invirtiendo en combustibles fósiles, especialmente en gas natural.

cop29

Esta COP29, apodada “La COP del Financiamiento,” tiene un mandato crucial: establecer un nuevo objetivo de financiamiento climático, el "Nuevo Objetivo Colectivo Cuantificado" (NCQG), donde los países desarrollados deben aumentar su apoyo financiero a los países en desarrollo para enfrentar el cambio climático. Este objetivo debe corregir el compromiso fallido de $100 mil millones anuales de 2009, que no se alcanzó hasta 2023. Sin embargo, organizaciones como OXFAM han cuestionado la forma de contabilizar estos fondos, ya que muchos países en desarrollo aumentaron su deuda nacional para acceder a préstamos “climáticos” y enfrentar un problema del cual no son responsables en gran medida.

Las negociaciones sobre el NCQG no serán sencillas, pues persisten diferencias entre los países desarrollados y en desarrollo sobre el monto, los países que deben aportar y recibir, la definición de financiamiento climático y la necesidad de asignar fondos específicos para adaptación y para pérdidas y daños. Los países en desarrollo exigen hasta $1 billón anual, diez veces la meta anterior. Esta COP29 representa una oportunidad clave para equilibrar el financiamiento hacia la adaptación y pérdidas y daños, áreas que han quedado tradicionalmente eclipsadas por la mitigación.

Además, esta COP29 necesita avanzar en la actualización de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC), que deben presentarse antes de febrero de 2025. Las NDC actuales son insuficientes: si se mantienen como están, el mundo se encamina a un aumento de temperatura de 2.8 °C, lejos de los 1.5°C acordados en París en 2015. Las dos semanas en Bakú serán decisivas para que los países incluyan en sus NDC los resultados del Global Stocktake de la COP28, que subraya la urgencia de triplicar la energía renovable, duplicar la eficiencia energética, reducir emisiones (incluido el metano), eliminar todos los combustibles fósiles y aumentar el financiamiento para adaptación.

El financiamiento climático y las NDC son solo algunos de los temas clave de esta cumbre, junto a pérdidas y daños, el programa de transición justa, informes de transparencia y evaluaciones de planes nacionales de adaptación. Estos puntos serán determinantes para evaluar el éxito de la COP29. En el informe y podcast “Camino a la COP29”, un esfuerzo conjunto de las Fundaciones Uno Punto Cinco y Heinrich Böll, se abordan estos temas de manera accesible para que la sociedad civil pueda comprender y participar en estos debates.

Finalmente, lograr acuerdos será especialmente desafiante en un contexto global marcado por conflictos armados, como en Ucrania y Medio Oriente, donde la violencia busca destruir comunidades y culturas específicas con fines políticos. Esta tendencia, también alentada por figuras como Donald Trump, se basa en la deshumanización del “otro”, justificando la brutalidad como una respuesta legítima a amenazas percibidas.

En un mundo cada vez más complejo, es fundamental mantener cierto optimismo para asegurar que la agenda climática siga siendo prioritaria, sin importar los gobiernos de turno, y en respuesta al aumento inevitable de la temperatura global y la intensificación de eventos climáticos extremos.