La Energía en Manos Ciudadanas
En las última décadas, el aumento de la crisis energética y el avance de los efectos del proceso de cambio climático hicieron evidente, tanto a nivel global como en la región, que las sociedades en desarrollo, tengan como desafío principal, conseguir una transición hacía una matriz energética segura, baja en emisiones y estable en costos.
En nuestra región, si bien con características de mercado notoriamente diferentes, tanto Chile como Argentina sintieron y siguen sufriendo los impactos de una matriz energética ineficiente y altamente basada en hidrocarburos.
En Chile, por ejemplo, la privatización, consecuente del mercado, y la total ausencia del Estado, provocan que los costos pasen directamente a los consumidores, ya sean grandes o pequeños,por lo que no hay demasiados incentivos para realizar inversiones a largo plazo en tecnologías limpias e eficientes como las renovables.
En el caso de Argentina, a pesar de que existe un mayor control del mercado y de los precios por parte del Estado, el resultado final es bastante parecido – ahora, que el país se ve obligado a salir de su política de subsidios para aplicar costos reales, la estrategia pareciera concentrarse sobre todo en reservas de gas y petróleo no convencionales para seguir abasteciendo la existente infraestructura energética ineficiente basada en hidrocarburos.
Si bien el debate energético en los países de la región en los últimos años alcanzó mayor amplitud y diversidad de miradas, sigue limitado a una comprensión más convencional del bien energía como un "commodity" cualquiera, soprendiendo, el notorio escepticismo que existe ante el potencial de energías renovables dadas las condiciones climáticas y geográficas inmejorables para estas tecnologías en la región.
Ante este escenario, vale la pena insistir con una mirada hacia las experiencias europeas de los últimos años: En un contexto de economías altamente industrializadas con una dependencia casi total de importaciones de hidrocarburos que se establecieron mediante nuevas políticas estratégicas decididas.
En la región, dada sus condiciones especificas geográficas, climáticas y territoriales, este concepto de transición energética descentralizada y democrática puede constituir un aporte clave para pensar distintas salidas a las diversas crisis energéticas latentes. Al mismo tiempo, ofrece una visión de desarrollo y bienestar apta a las particularidades y la diversidad de los territorios en la región.
Con esta publicación, queremos realizar un aporte desde el análisis y la reflexión, para pensar en la energía desde una perspectiva viable, ciudadana y democrática, con el fin de que tomemos las experiencias de Europa como ejemplo para así tomar la iniciativa y empoderarnos de una transición energética que genere beneficios para todos.