El derecho a abortar: una lucha colectiva que no termina

En Argentina tenemos la ley 27.610, de Interrupción Voluntaria del Embarazo pero también tenemos motivos para seguir luchando por abortos cuidados. La ley entró en vigencia el 24 de enero de 2021 y, desde ese momento, Socorristas en Red (SenRed) señaló la importancia de cuidarla y de hacerla valer. Cuidar la ley y hacerla valer significa extenderla más y más, hacer vivir su texto en toda su magnitud y densidad. Entonces, justamente por eso, SenRed viene dando cuenta de la complejidad de prácticas y obstáculos que rodean las garantías de este derecho. Y también, del mismo modo, continúa con el armado de estrategias necesarias para que la vivencia del aborto no sea algo vergonzante, traumático e indigno. “No hay dudas de que esta ley representa un enorme piso de posibilidades, pero nunca va a ser el techo de nuestras demandas y aspiraciones. Por eso seguimos insistiendo en la importancia de abortos libres y feministas”, afirman.

Archivo Senred. Plenaria Plurinacional en Villa Giardino,Córdoba. 26, 27 y 28 de Febrero de 2022.

En Argentina tenemos la ley 27.610, de Interrupción Voluntaria del Embarazo pero también tenemos motivos para seguir luchando por abortos cuidados. La ley entró en vigencia el 24 de enero de 2021 y, desde ese momento, Socorristas en Red (SenRed) señaló la importancia de cuidarla y de hacerla valer. Cuidar la ley y hacerla valer significa extenderla más y más, hacer vivir su texto en toda su magnitud y densidad. Entonces, justamente por eso, SenRed viene dando cuenta de la complejidad de prácticas y obstáculos que rodean las garantías de este derecho. Y también, del mismo modo, continúa con el armado de estrategias necesarias para que la vivencia del aborto no sea algo vergonzante, traumático e indigno. “No hay dudas de que esta ley representa un enorme piso de posibilidades, pero nunca va a ser el techo de nuestras demandas y aspiraciones. Por eso seguimos insistiendo en la importancia de abortos libres y feministas”, afirman.

Sabemos que la ley colabora en des-estigmatizar el aborto porque es el Estado quien reconoce ese derecho y quien colabora en sostener la decisión de abortar. Sin embargo, también es cierto que su cumplimiento se da de manera muy desigual según las provincias, las ciudades y las instituciones. En la ciudad de Neuquén, por ejemplo, hay dos hospitales cuyos equipos de salud garantizan el derecho, y otro con profesionales que desalientan expresamente la decisión. Por eso, es necesario subrayar el acceso desigual que se da en los territorios. Otro ejemplo: de los 5500 centros de salud que reciben y distribuyen el botiquín vinculado a salud sexual y métodos anticonceptivos, sólo 1247 garantizan el acceso a la Interrupción Voluntaria y Legal del Embarazo.

También hay que señalar que la ley no implica buenas prácticas aunque su texto y su protocolo apunten a eso. Tampoco trae consigo el trato humanizado ni la convicción de que el aborto es de quien aborta, clave de la política de cuidados socorrista y uno de los motivos por los que las personas gestantes siguen conectando con SenRed, cuyo número de acompañamientos crece año a año. Es ahí donde el activismo socorrista aparece fuertemente, porque ayuda a dar calma y seguridad, porque abre la escucha y la circulación de la palabra y porque ofrece tips de cuidados para que quien aborta sienta que el aborto puede ser vivido en compañía.

A cada persona que llama a las distintas grupas de la Red, siempre se le ofrece las dos posibilidades: ir al sistema de salud o un aborto autogestionado, como lo llaman en los talleres. Y así acompañan a cada persona donde decida que quiera abortar.  Entre el 20 de enero y el 31 de diciembre registraron acompañaron a 11.781 personas en sus abortos. De ese total, 2.609 fueron acompañados en el sistema de salud y 9.172 fueron abortos autogestionados.

A más de un año de la ley de aborto en Argentina, SenRed ha venido observando acciones que obstaculizan la práctica, que muchas veces son crueles y dolorosas para quienes abortan. Muchas personas vivencian la expulsión en el sistema de salud y experimentan la burocratización, la falta de confidencialidad, las estigmatizaciones, la desinformación y la información falsa. “Hay que desarmar el silencio que ronda al aborto en el sistema de salud”, señala Ruth Zurbriggen.

Dentro de este abanico de complejidades en el sistema de salud, es importante observar que la causal de salud integral aún tiene sus problemas porque deja la definición en les profesionales de la salud. Por eso, SenRed apunta que “la deuda es con la causal salud”. Ocurrió en una localidad de Entre Ríos, donde una profesional de la salud le sugirió a una joven de 16 años (que cursaba un embarazo de 18 semanas y había solicitado un aborto por causal salud integral) que dijera que había sido violada para que fuera más fácil acceder a una ILE (Interrupción Legal del Embarazo).

Asimismo, ante la falta de espacios de salud que garanticen Interrupciones Voluntarias y Legales de Embarazos, ocurre también que se producen traslados a otras localidades para poder acceder a un aborto. Se opta por trasladar a las personas que necesitan abortar, sin tener en cuenta que esto genera más angustias en tanto se requiere de otra disposición (licencias laborales y organización familiar) y contribuye -en cierta medida- a estigmatizar la decisión.

La ley 27.610 obliga a que se garanticen los abortos de manera gratuita en todo el sistema de salud, incluyendo obras sociales y prepagas, sin embargo existe una falta de control porque aún no están aceitados los mecanismos de acceso en muchas obras sociales o se actúa de manera diferente según la provincia.

Tampoco deja de ser frecuente el uso de las ecografías como instrumento anti-aborto. En determinados lugares el personal de salud que realiza ecografías insiste con mostrar imágenes, hacer escuchar sonidos y hacer comentarios como: “¿No pensaste en tenerlo? Se ve todo tan bien acá”, aun cuando leen en el diagnóstico de la indicación: IVE o ILE.  Lo mismo sucede en el sistema privado de salud, donde también se producen obstaculizaciones y se ejerce violencia cuando insisten en mostrar las imágenes de la ecografía: "Felicitaciones mamita, tranquila, ya te vas a hacer a la idea. Ahora vamos a empezar con el ácido fólico", le dijo un médico ginecólogo a su paciente a pesar de que había escuchado por parte de ella que no quería volver a ser madre.

La falta de confidencialidad, especialmente en localidades pequeñas, se suma al listado de cuestiones a trabajar y corregir. Una joven decía que ella en su pueblo no quería abortar porque se iba a enterar toda su familia.

Es preciso destacar que la ley 27.610 permite a las niñas menores de 13 años obtener toda la información para poder acceder a este derecho firmando un consentimiento informado y estando acompañadas por una persona adulta que sea de su confianza. Sin embargo, son pocos los espacios directamente vinculados a adolescentes. Cuidar a niñas y adolescentes de la maternidad forzosa implica desplegar con fuerza una formación profesional que acompañe y admita -como parte de la atención integral- que en esas edades el riesgo es el embarazo y la maternidad, no el aborto.

Respecto de la importancia de la difusión de la ley, aún no hay campañas masivas de difusión del derecho a abortar para que su cumplimiento se produzca de manera total y efectiva. Los espacios de salud no suelen tener información accesible, sencilla y comprensible, en distintas lenguas y soportes para facilitar la solicitud y concreción del aborto. Por eso, la insistencia de SenRed en difundir a través de campañas, la existencia de la ley y la exigencia de su cumplimiento en todo el país.

Por otra parte, los procesos de legalización de aborto tienen que ir acompañados de políticas públicas que busquen la mejor calidad de la práctica. Está avalado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que el uso de mifepristona combinada con misoprostol mejora la efectividad, acorta el tiempo del aborto, trae enormes beneficios para quien aborta y para quien garantiza el derecho. Sin embargo, en Argentina la mifepristona no ha sido autorizada para su comercialización. El aborto con misoprostol parecería ser la única opción posible y son excepcionales los espacios que ante la solicitud de un aborto se ofrece la posibilidad de abortar mediante una aspiración manual endouterina (AMEU). Los centros de atención primaria de la salud no pueden ofrecer la práctica de AMEU porque no cuentan con autorización y espacios habilitados. Y como contrapartida, continúan los legrados como método para garantizar abortos aun cuando se desaconseja por tener mayor riesgo de complicaciones como perforación uterina, hemorragia y secuelas en la fertilidad futura.

No caben dudas de que la promulgación de la ley 27.610 ha sido un hecho trascendental e histórico para las mujeres y otros cuerpos con posibilidades de abortar de nuestro país, un inmenso logro en la larga historia de lucha de generaciones y generaciones pero está  abierta la puerta para continuarla, porque nos merecemos abortos cuidados, libres y feministas. Y en eso estamos.

Archivo Senred. Plenaria Plurinacional en Villa Giardino,Córdoba. 26, 27 y 28 de Febrero de 2022.
Plenaria Plurinacional en Villa Giardino,Córdoba. 26, 27 y 28 de Febrero de 2022.

En SenRed apuestan a que el proceso abierto en otros países de América Latina siga extendiendo la lucha entrelazada por la despenalización y legalización del aborto. A lo alcanzado hace pocas semanas en Colombia, se le suman las esperanzas puestas en la movilización social de Chile y los compromisos con la temática, expresados públicamente por el nuevo gobierno de Gabriel Boric Font.

Argentina, 4 de marzo de 2022