Este 25 de noviembre todas decimos ¡Ni Una Menos, Vivas nos queremos!

Cada vez son más las mujeres y las niñas que se unen para luchar por la erradicación de la violencia machista y la estructura patriarcal que rige en todos los ámbitos de la sociedad. Mujeres de diversas partes de Latinoamérica y el mundo están alzando su voz con más fuerza para decir basta a los abusos y a las agresiones en su contra.

 Hace 17 años que todos los 25 de noviembre miles de personas de todo el mundo se movilizan en las calles para visibilizar y presionar para que los Estados profundicen sus políticas para acabar con la violencia machista. La educación sexista, la publicidad y la inexistente perspectiva de género en los medios de comunicación, se encuentran entre los principales productores y reproductores de los patrones discriminatorios hacia las mujeres.

La conmemoración de esta fecha, el Día Internacional de la Eliminación contra la Violencia hacia las Mujeres, proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en el año 1999, denuncia este tipo de violencia pero además llama a los Estados a generar políticas que protejan los derechos humanos de las mujeres y niñas de todo el mundo.

En Argentina, en 2015 el hartazgo por los femicidios generó una masiva movilización social sin precedentes, convocada espontáneamente a través de las redes sociales a partir de la muerte de Chiara Paez, una adolecente de 14 años, embarazada, asesinada por su novio de ese entonces. Aquel 3 de junio, miles de personas se concentraron en la Plaza del Congreso en Buenos Aires para marchar, pero también otras miles lo hicieron en el resto del país, incluso transcendió fronteras y el reclamo llegó a Colombia, Uruguay, Bolivia, Guatemala, Chile, Perú y España.

"NiunaMenos", fue el nombre de la campaña originada en Argentinaque generó un cambio significativo para la agenda de los medios de comunicación yde las organizaciones de la sociedad civil. Sin embargo, también fue un claro llamado de atención a la clase política que en 2009 aprobó por mayoría en el Congreso de la Nación la Ley de Protección Integral de las Mujeres (Ley Nº 26.485), pero al que nunca se reglamentó en su totalidad lo que se traduce en la falta de asignación de presupuesto pero también en la ausencia del diseño de políticas integrales. A ello se suma la falta de estadísticas oficiales sobre femicidios y a la insuficiencia del Poder Judicial para responder en tiempo y forma a la violencia que sufren las mujeres.

De la visión de la ciudadanía con respecto a la violencia sexista.

Este año, a la consigna "#NiunaMenos" se le sumó el lema "#VivasnosQueremos". En Argentina se estima que cada treinta horas una mujer es asesinada por el solo hecho de ser mujer. En lo que va de este año, ya van 230 mujeres que han perdido la vida en manos de hombres. 

En 2016, la convocatoria a marchar volvió a repetirse el pasado 19 de octubre reuniendo a más de 120 mil personas en las calles. En esta oportunidad, lo que activó la movilización fue el caso de Lucía Pérez, una adolescente de 16 años, quien fue drogada, violada y asesinada en Mar del Plata, provincia de Buenos Aires, en la misma semana que se desarrollaba el 31 Encuentro Nacional de Mujeres en Rosario. Sumado a ello, se realizó el primer paro de mujeres en el país contra los femicidios y la violencia machista.

En Chile, la campaña "Niunamenos" se reactivó el mismo 19 a causa del asesinato de una pequeña de tan solo 10 años, asfixiada y asesinada por su padrastro. Más de 80 mil personas se concentraron en la principal avenida de Santiago para manifestar su repudio frente a este hecho. En este país del Cono Sur, ya son 34 los femicidios registrados en el 2016.

Para este próximo 25 de noviembre el llamado es a participar en las manifestaciones y actividades que se realicen en el marco del "Día Internacional de la Eliminación en Contra de la Violencia hacia las Mujeres". No basta con la generación de leyes para poner fin a la violencia machista. Se necesita urgentemente un cambio cultural que reúna la fuerza ciudadana con la responsabilidad de las autoridades gubernamentales para diseñar políticas efectivas que acaben con esta lacra.