Durante el año 2010, los negociadores comerciales de la Unión Europea y el Mercosur retomaron las conversaciones para la firma de un Tratado de Libre Comercio entre ambos bloques regionales. Sobre finales del año pasado, se estimaba que la firma del TLC se llevaría a cabo en este año 2011, pese a lo cual, aún no se conocen públicamente los documentos de negociación.
Frente a este panorama, es posible estimar cuáles serán los requerimientos de la negociación en materia de Propiedad Intelectual a la luz de las negociaciones vigentes entre la Unión Europea y la India así como el recientemente aprobado TLC entre la Unión Europea y Corea. Ambos documentos nos ayudan a pensar cuáles pueden ser las consecuencias de un TLC de esta naturaleza para los países miembros del Mercosur.
El presente trabajo analiza dos temas importantes en los apartados de Propiedad Intelectual: la protección de las variedades vegetales y la protección de la información no divulgada, es decir, los datos de prueba de la industria farmacéutica y agroquímica. Ambos temas tienen directo impacto sobre el derecho a la salud de nuestra ciudadanía, por su particular incidencia en el sector de medicamentos genéricos y en la posibilidad de poner medicamentos asequibles en el mercado. Por el lado de UPOV, el posible cambio del sistema de UPOV 78 a UPOV 91 traería serias consecuencias para el trabajo de los campesinos y productores de alimentos en nuestros países.
Mientras los gobiernos sopesan los beneficios comerciales y las posibles reducciones arancelarias que permitirían afianzar el modelo agroexportador de nuestra región, es indispensable recordar que cláusulas de ese tipo perjudican directamente a los 1500 millones de campesinos que siguen produciendo alimentos en un mundo donde 900 millones de personas tienen hambre.
La firma de un TLC con la Unión Europea puede reducir dramáticamente las flexibilidades de ADPIC para la región, contradecir los postulados de la Convención de Diversidad Biológica, así como dejar sin efecto los acuerdos en relación a salud pública de la Ronda de Doha de la OMC. El impacto sobre los derechos económicos, sociales y culturales de nuestros pueblos es directo, en particular en materia de alimentos, acceso medicamentos y derecho a la salud.